Begoña Marín
Pregunta.- Su papel en la serie tiene puntos en común con usted. ¿Se siente identificada con él?
Respuesta.- Sí, y estoy feliz porque Roxy lo tiene todo. Es una bailarina cantante que ve la vida con lentejuelas, alegría, positivismo, brillo, focos y con sentimiento, pero que tiene un trasfondo muy especial. P.- ¿A qué ser refiere? R.- El personaje tiene dos caras, la positiva y alegre de artista y otra humana muy fuerte. Le pasarán unas cosas que también son drama, por lo que se puede decir que me han dado la comedia y el drama al extremo, sin término medio. Es un reto como actriz.
P.- Curiosamente, Luis San Narciso, el director de casting, también descubrió a su hermana…
R.- Él me había visto en las producciones que había hecho como cantante y bailarina y en una cosa que hice en la serie de Rocío Jurado, para Antena 3, que todavía no se ha visto, de la hija de Caracol cuando era joven. Él fue también el director de una película que iba a hacer en la India de protagonista pero que luego se cayó por temas de presupuesto. Yo creía que ahora no me iban a coger, lo tenía claro, pero el acento no me lo he tenido que quitar y eso lo hace más real, proque la gente es de todo el mundo.
P.- Canta, baila, actúa… Desarrollar bien tantas facetas no es habitual entre los artistas españoles.
R.- La gente no entiende que en EE. UU. los grandes de Broadway cantaban, bailaban e interpetaban, y eso es algo que no está incorporado aquí en España. Aquí creen que o eres cantante o actriz o bailarina y no entienden que hay personas que son polifacéticas y se expresan en cualquier disciplina.
P.- ¿Con cuál disfruta más?
R.- Me encanta expresarme, me alucina el baile, la canción y la interpretación porque yo no las separo en ningún momento. Yo cuando bailo, interpreto, y cuando canto interpreto. Va todo junto.
P.- ¿Ha recibido alguna preparación o es talento innato?
R.- No he hecho nada de interpretación pero sí he estudiado danza. Me formé ocho años en un conservatorio y recibí clases de baile y canto. Para mí eso es también arte dramático. Los directores no se pueden creer que nunca haya recibido clases de interpretación, pero sí la gente que me conoce. Saben cómo me expreso y no se sorprenden de que también me atreva a ser actriz.
P.- ¿En qué se diferencia de su hermana Paz?
R.- Físicamente podemos ser parecidas, pero yo vengo de la batalla, en los teatros, viajes, he llevado una vida en el barro y no se me puede dar a conocer porque no he salido en una gran pantalla.
P.- ¿Qué le parece la obra de Augusto Ferrer- Dalmau?
R.- Cuando conocí su obra me quedé fascinada. Es un pintor maravilloso, un virtuoso del pincel. Un maestro único que con sus pinceladas consigue que viajemos a través de la historia de los soldados españoles. Creo que lo que tiene Augusto es un don y desde aquí expreso mi más sincera admiración hacia este gran artista.
P.- ¿Se animaría a dar el salto a la gran pantalla?
R.- Con 8 añitos rodé con Carlos Saura ‘Sevillanas’ junto a Rocío Jurado, Camarón de la Isla, Lola Flores, Paco de Lucía… Estaba en el conservatorio, hicieron un casting y me eligieron. Fue mi primer viaje a Madrid, porque yo vivía en Sevilla. Me identifiqué totalmente con la parafernalia de este mundo, y a partir de ahí supe que este era mi sitio: las luces, los focos, las lentejuelas, los volantes…
P.- ¿Te irías fuera de España como Penélope Cruz?
R.- Estuve viviendo en Miami cuatro años, pero yo me siento muy española, me gustan mucho las tradiciones de aquí. La verdad es que no es un objetivo prioritario en mi vida. La verdad es que me gusta mucho mi país. He viajado mucho por Europa y también me gusta. Y de América, conozco también mucho Argentina y México….Pero, Estados Unidos, aunque me gusta, como ya lo he vivido y sé el sistema de allí… De momento, no me lo planteo.
La música y el arte enamorados
Sara Vega fue una de las protagonistas del evento organizado por INTERIORES by Music Loves Art, en el que también participó el artista Juan Habichuela con un magnífico recital. Juan Habichuela Nieto está considerado por la crítica cómo el sucesor de Paco de Lucía. Pertenece a una de las familias más importantes y longevas del flamenco, la que procede de «Habichuela el Viejo» y que brilló con Juan Habichuela, el gran maestro de la guitarra y abuelo de Juan Habichuela Nieto, quien le entregó su guitarra públicamente en un acto simbólico que quería reconocer la brillante continuidad de la saga. Juan Habichuela Nieto es el gran futuro del flamenco y de la guitarra, cómo ya intuyó Enrique Morente, cuando a los 16 años se lo llevó a Nueva York, y aún muy joven prosiguió por todo el mundo dejando el pabellón en lo más alto. Enrique García Lozano mostró una serie de cuadros inspirados en el mundo de la ópera. Su obra contiene elementos que recuerdan a los abigarrados fotomontajes de Josep Renau que marcaron una época en el panorama artístico español e internacional. La vinculación de Lozano en su formación académica, a las prestigiosas escuelas norteamericanas le sitúa en una dimensión cosmopolita del arte. Mahou, Solán de Cabras y King Peter Vodka hicieron posible este evento organizado por Music Love Art, que fue descrito por la prometedora artista Sara Vega como un «evento maravilloso que aúna música y arte». Y añadió que «En España hay mucho talento y hay que compartirlo».